“Algún
día en cualquier parte, en cualquier lugar indefectiblemente te encontrarás a
ti mismo, y ésa, sólo ésa, puede ser la más feliz o la más amarga de tus
horas”.
(Pablo
Neruda)
Anders (Anders Danielsen Lie), de treinta y cuatro años de edad, se
encuentra finalizando un programa de desintoxicación de drogas en un centro
ubicado en el campo. Un día obtiene permiso para trasladarse a la ciudad, donde
ha concertado una entrevista de trabajo. Allí se reencuentra con amigos,
familiares y viejos conocidos a los que hacía mucho tiempo que no veía.
Con Oslo, 31. august, Joachim
Trier, primo lejano del Trier famoso, sigue poniendo de manifiesto el excelente
estado de forma en el que se halla inmerso el cine escandinavo actual (Thomas Vinterberg, Nicolas Winding Refn, Susanne Bier, Tomas Alfredson...). Se trata de un
filme hipnótico, de gélida belleza, cuyo visionado deja huella en el espectador
mucho más allá de la hora y media de metraje durante la que se extiende. Libre adaptación de la novela de Pierre Drieu La Rochelle El fuego fatuo (1931), también llevada al cine en 1963 por Louis Malle.
La acción se desarrolla a lo largo de un solo día, de mañana a mañana.
Veinticuatro horas para seguir adelante o terminar con todo. La película se
abre con filmaciones caseras de la ciudad de Oslo, acompañadas por testimonios
de diferentes voces que rememoran determinados acontecimientos de sus
respectivos pasados. Son recuerdos de los que se desprende nostalgia y amor
hacia la ciudad, los mismos sentimientos que embargan al atribulado
protagonista cuando recorre sus calles y pulula por sus rincones. La inquieta
pero calma cámara de Trier, convierte a la urbe en un personaje más, quizá el principal
de esta amarga historia de imposible rehabilitación emocional. El joven Anders
Danielsen Lie, quien ya había colaborado con el director en su ópera prima, Reprise (2006), realiza una veraz
interpretación sin la cual la cinta no habría funcionado.
Dos escenas que rescato: aquella en la que Anders escucha las
conversaciones de las personas que tiene a su alrededor en una cafetería, tomando así
conciencia de que su proyecto vital está acabado; y el plano secuencia final,
trágica culminación a un filme espléndido. Qué jodida puede llegar a ser la
vida a veces, ¿verdad?
Este tipo de películas me suelen gustar un güebo. Por lo que dices parece que se trate de una película pequeña, sencilla, trágica y sin pretensiones. La estoy viendo pero ya.
ResponderEliminarHola, Francisco:
EliminarHas dado en el clavo. Creo que te va a gustar.
Un saludo.
Hola Ricardo.
ResponderEliminarPor lo general encuentro mucho cine interesante en los países escandinavos, los nombres de los directores que has citado, solo son unos pocos y de los mas conocidos...
Ha este director en cuestión, no lo conocía.
La película me gusto mucho, por muchas cuestiones... La forma en la que el director aborda la tematica, la dirección esta llena de matices y como tu bien dices el protagonista esta genial. La vi cuando pusiste el cartel de la proxima reseña hace algún tiempo.
Te recomendaría a Lucas Moodyson director sueco muy interesante y con mucho talento en mi opinión (si no lo conoces).
Ingmar Bergman dijo que su primera película era la primera obra maestra de un director con mucho talento. Aunque yo ya conocía su cine antes de leer las declaraciones del susodicho... ``Que conste en acta que no me deje llevar por Bergman´´ ;)
Un saludo y gracias por este pequeño regalo.
Hola, Álex:
EliminarReconozco que no he visto nada de Lucas Moodyson, así que tomo nota de tu recomendación y de la de Bergman :).
Un cordial saludo y gracias a ti.
Me la apunto para pendientes! Por cierto, de Winding Refn qué opinas? Vi que 'Drive' no te hizo mucho tilín..
ResponderEliminarHola, neordental:
EliminarWinding Refn me parece un cineasta interesante. "Drive" me gustó, pero no me pareció ese peliculón del que algunos hablaban.
Un saludo.