“Renunciar
a mi pasión es como desgarrar con mis uñas una parte viva de mi corazón”. (Gabriele D' Annunzio)
Londres, alrededor de 1950. Hester Collyer (Rachel Weisz), esposa del
honorable juez William Collyer (Simon Russell Beale), se enamora de Freddie
Page (Tom Hiddleston), piloto de las fuerzas aéreas británicas durante la
Segunda Guerra Mundial.
Interesante y, por momentos, exquisito melodrama romántico del veterano
director inglés Terence Davies, quien adapta para la gran pantalla la obra
homónima del dramaturgo londinense Terence Rattigan estrenada allá por 1952.
The Deep Blue Sea puede
recordar al David Lean de Breve encuentro,
al que cita visualmente en varias ocasiones; sin embargo, su espíritu bebe, ante todo, de las tragedias que Max Ophüls realizó en los años cuarenta y
cincuenta del pasado siglo. Aquellas en las que la delicadeza femenina se
marchitaba por el mero hecho de amar y sentir más que el hombre. Se trata un
relato elíptico de amor fou que
transita desde el abismo de la desesperación hasta una no menos desesperada
aceptación.
El filme se inicia con el intento fallido de suicidio por parte de
Hester. A partir de ahí, la acción se desarrolla a lo largo de un solo día,
alternándose el tiempo presente con numerosos flashbacks que nos ilustran acerca de lo ocurrido con anterioridad
a tan lamentable suceso. La narración se cuece a fuego lento, muy lento, y los
movimientos de cámara poseen una serenidad cuasi dreyeriana. Cada uno de sus encuadres
está elaborado con sumo gusto y cuidado, dando lugar a una puesta en escena de
deliciosa simetría. La magnífica fotografía de Florian Hoffmeister otorga al
conjunto una melancólica textura crepuscular. Si a todo esto le sumamos la
utilización en determinadas escenas, como la del sublime comienzo, del Concierto para violín y orquesta op. 14 de Samuel Barber, obtendremos una envoltura audiovisual embelesante. Es una
lástima que Davies nunca libere a la película de su origen teatral, demasiado
evidente, y que su afán estético repercuta de manera negativa sobre la
intensidad dramática de la historia.
Rachel Weisz realiza una interpretación inmensa, pero su compañero de
reparto, el joven Tom Hiddleston, no está a su altura. El resultado habría sido bien diferente de haberse optado por un intérprete masculino de mayor entidad y presencia
en pantalla (pienso en Michael Fassbender, por ejemplo). De todos modos, estamos
ante un trabajo cinematográfico impregnado de personalidad autoral y claramente por encima
de la media habitual. Eso sí, la etiqueta de obra maestra que le han colocado
algunos le queda bastante grande.
Quizás ha sido eso lo que me ha pasado. Tan buena la ponían que me esperaba más. Rachel Weisz es lo mejor!
ResponderEliminarHola, Manderly:
EliminarYo también me esperaba algo más. En algunos momentos me resultó algo fría. Me encanta Rachel Weisz, gran actriz y una mujer muy hermosa.
Un saludo.
El director combina la fidelidad al texto con una estructura compleja y una estilización delicada y sutil. Lo cual, unido al tono trágico de la historia, no favorece la conexión con el espectador. Digo ésto sin ningún ánimo peyorativo, pues se trata de un título riguroso y apasionado, que cuenta como bien señalas con una interpretación sobresaliente de Rachel Weisz. Es más, la pondré entre mis favoritas del año; y que conste que lo he decidido antes de ver tu post. Un abrazo.
ResponderEliminarHola, ricard:
EliminarQue quede claro que la película me ha gustado, pero creo que podría haber dado algo más de sí. Le falta intensidad emocional y el actor no me convence. La Weisz genial, como siempre. Tengo ganas de ver tu lista de favoritas del año :)
Un abrazo.
Te molesta lo mismo que a mí. Como con un error de casting y, a mi modo de ver, también de montaje el director se carga todo el excelso trabajo de ambientación y la superlativa actuación de Rachel Weisz. Pero así es. El resultado es que el espectador entra y sale alternativamente de las desgarradas pasiones de la protagonista hasta que llegas a un punto que te da igual. Aún así es una película decente.
ResponderEliminarSaludos.
Hola, Fransico:
EliminarMe gustó "The Deep Blue Sea", pero esperaba mucho más. El conjunto te deja bastante frío. Uno sólo recuerda la interpretación de la Weisz, que además aparece guapísima.
Un saludo.