“La familia es la
patria del corazón”.
(Giuseppe
Mazzini)
Rosaria
Parondi (Katina Paxinou) y cuatro de sus hijos, Simone (Renato Salvatori),
Rocco (Alain Delon), Ciro (Max Cartier) y Luca (Rocco Vidolazzi), llegan a
Milán procedentes de su tierra natal, Lucania, en busca de trabajo y unas
mejores condiciones de vida. Allí se encuentran con Vincenzo (Spiros Focas), el
mayor de los hermanos, que trabaja como albañil y está comprometido con Ginetta
(Claudia Cardinale).
Sobrecogedor
melodrama familiar de raíces neorrealistas que transita hacia una estilizada
estética de claroscuros propia del cine negro, anticipando algunos de los
elementos operísticos (la estructura narrativa, la dirección, el gusto por lo
visual, la catarsis emocional de los personajes) que caracterizarían al cine
posterior de su inmarcesible autor. La película, coproducción italo-francesa de
unas tres horas de metraje, obtuvo el Premio FIPRESCI de la Crítica
Internacional en el Festival de Venecia de 1960.
Rocco e i suoi fratelli
está estructurada, como las tragedias de Shakespeare, en cinco actos. Cada uno
de esos cinco actos recibe el nombre de cada uno de los cinco hermanos Parondi
por orden de edad, desde el mayor hasta el menor (Vincenzo, Simone, Rocco, Ciro
y Luca). No obstante, son dos los hermanos que tienen un mayor peso en el
desarrollo de la trama, y los que, por tanto, aparecen mejor definidos: Simone y Rocco.
De hecho, se puede decir que buena parte del guión (en el que intervinieron
hasta siete manos, incluidas las del propio Visconti y las de la reconocida
guionista Suso Cecchi D´Amico) gravita en torno a la contraposición que
progresivamente va estableciéndose entre ambos: enamorados de una misma mujer,
la prostituta Nadia (Annie Girardot), y dedicados, aunque con suerte dispar, a
la misma profesión, el boxeo. A Simone la vida en la gran ciudad lo va
corrompiendo poco a poco debido a su afición al sexo, el juego y la bebida. Lo
suyo es una auténtica bajada a los infiernos de los celos, la desesperación y
el pecado tras enamorarse de Nadia. Rocco, en cambio, de carácter bondadoso y
generoso, termina erigiéndose como el inesperado pilar sustentante del edificio
familiar, sacrificando su felicidad (y la de Nadia) en favor de su querido hermano.
Ese montaje en paralelo, absolutamente magistral por su impacto emocional, en
el que Visconti nos muestra a Rocco, por un lado, venciendo sobre el
cuadrilátero en un combate importante, y a Simone, por el otro, cometiendo un
atroz crimen a orillas del río, refleja a la perfección el ascenso de uno y la
definitiva caída del otro.
El
reparto de la película incluye a conocidos actores italianos, franceses y
griegos, destacando las interpretaciones de Renato Salvatori y, sobre todo,
Annie Girardot, quien bajo mi punto de vista constituye la gran figura trágica
del filme. Su escena junto con Alain Delon entre los pináculos y contrafuertes
del tejado de la Catedral de Milán, es una de las más bellas que yo haya podido
contemplar en una pantalla de cine.
Totalmente de acuerdo, una película bellísima y fundamental en la obra de su director. Hace años le dediqué un post donde también destacaba la escena en la catedral.
ResponderEliminarEntre mis propósitos para el nuevo año está el de escribir un par de entradas sobre el director italiano, después de haber recuperado algunos títulos de su filmografía, algunos muy conocidos y otros no tanto. Curiosamente, de su última etapa he visto casi todas las películas pero nunca "Ludwig", un título que acostumbras a citar en tus listas de grandes obras.
Un saludo.
Hola, ricard:
EliminarSeguramente la escena de la catedral sea la más recordada de la película. Y no me extraña.
En cuanto a "Ludwig", como bien señalas, la considero una de las más grandes obras maestras de la historia del cine. Para mí es la cumbre del cine de Visconti y su trabajo más personal.
Un saludo.
Considero que el hermano más interesante es Ciro aunque el personaje está poco desarrollado.
ResponderEliminarHola Joserra,
EliminarEs imposible que todos los hermanos estén desarrollados del mismo modo. Visconti se centra básicamente en Rocco y Simone.
Un saludo.
Estimado Ricardo: De Viscoti vi Obsesión, La tierra tiembla, Rocco y sus hermando, El Gatopardo, La caída de los dioses y Muerte en Venecia. La que más me gustó hasta ahora es Rocco y coincido plenamente con tu excelente crítica. Tengo mucha intriga por ver Ludwig a la que siempre citas como la mejor película de este director. Saludos.
ResponderEliminarHola Marcos,
EliminarNo me canso de recomendar 'Ludwig', para mí el filme más artístico y personal de su autor. Espero que te guste.
Un saludo.