Como cada noche, John LeTour (Willem Dafoe), camello de lujo y ex drogadicto que trabaja para su amiga Ann (Susan Sarandon), sale a realizar entregas para sus diversos clientes. Durante una de esas jornadas, se topa por casualidad con Marianne (Dana Delany), quien fue su pareja y compañera de vicios tiempo atrás.
Esta excepcional y prácticamente olvidada película, constituye el mejor trabajo de Paul Schrader, cineasta infravalorado cuya filmografía merece una revisión urgente. A veces me pregunto cómo habría cambiado la carrera de este realizador, desconocido para la gran mayoría del público, si hubiera dirigido él mismo el soberbio guión que escribió para Taxi driver. Nunca lo sabremos.
En Light Sleeper, el autor de Aflicción volvía a exponer algunos de los planteamientos argumentales y temáticos ya aparecidos en el citado filme de Scorsese, con el que la obra que ahora nos ocupa guarda más de un paralelismo: tanto John LeTour como Travis Bickle trabajan de noche, desplazándose en ambos casos en automóvil; los dos tienen dificultades para conciliar el sueño, por lo que pasan horas y horas reflexionando (comiéndose el coco) en la soledad de sus apartamentos; sus relaciones con el sexo opuesto acaban por acarrearles problemas; uno y otro deciden comprar un arma para hacer justicia por su cuenta…
Partiendo de una sobria puesta en escena, Schrader dota a su filme de una conseguida atmósfera noctívaga y opresiva que ya quisieran pasa sí cintas recientes como Drive. De la mano del protagonista recorremos oscuras calles humedecidas por la lluvia, clubes de moda, sórdidos tugurios, hospitales deprimentes y apartamentos de angostos pasillos. La inolvidable y ochentera banda sonora de Michael Been, líder de la banda de rock The Call, que incluye temas como World On Fire, Without You, Feat o To Feel This Way, envuelve brillantemente al conjunto.
El personaje de un colosal Willem Dafoe (qué actor tan magnífico), recoge sus impresiones sobre su oficio y el mundo que le rodea en un diario que escribe, ante la falta de sueño, cuando llega a casa de madrugada. La mayor parte de su clientela es gente acomodada que oculta una evidente falta de valores bajo su lujoso bienestar.
El final, al igual que ocurriera en Taxi driver, es un baño de sangre redentor (la redención es el tema central de la obra del calvinista Schrader) y necesario para acallar la ira y el odio generados por un mundo pestilente que se hace difícilmente soportable.
Light Sleeper, una gran película que desde Esculpiendo el tiempo queremos reivindicar. Imprescindible a nuestro entender.
La ví hace muchos años y tendría que recuperarla; recuerdo que era muy atmosférica. De Schrader me gustaron mucho "Mishima" y "El placer de los extraños". Saludos.
ResponderEliminarHola, ricard:
EliminarMerece la pena revisarla. Efectivamente, la atmósfera turbia y opresiva es uno de los aspectos más destacados del filme. Creo que tanto "Mishima" como "El placer de los extraños" son de lo mejorcito de Schrader. Repito, resulta muy interesante revisar algunas de sus obras.
Saludos.
De nuevo el severo y autopunitivo Paul Schrader volvía a presentarnos en este oscuro drama urbano un antihéroe entrando en crisis que viene a ser la prolongación, en varios aspectos, de los que ya recreara en anteriores guiones suyos filmados por él o por otros realizadores (para situarnos, recordemos el Robert de Niro que tú mencionas de "TAXI DRIVER", o el Richard Gere de "AMERICAN GIGOLO"). Las imágenes de la película, ásperas, asfixiantes y noctámbulas, logran transmitir, pese a algunos tiempos muertos (están buscados?), el clima de inestabilidad y tensión en que se mueve el protagonista, muy bien entendido por el extraño Willem Dafoe.
ResponderEliminarUn saludo.
Hola, Teo:
EliminarComo casi siempre, muy acertadas las líneas con las que defines esta espléndida película. No creo que Schrader tenga un trabajo más sólido y personal que el presente. Yo veo interesantes, por lo que aportan a la perfilación del personaje principal, hasta esos tiempos muertos que comentas.
Un saludo.
La tengo pendiente camarada, al igual que otras dos cintas destacadas ("Hard Core" y "Blue Collar") de ese heavy del cine que es Paul Schrader.
ResponderEliminarGanas no me faltan y Sarandon + Dafoe son dos alicientes extra nada desdeñables, sólo hay una pega no he conseguido encontrarla en un par de expediciones que hice por la web en su busca.
Un abrazo.
Hola, camarada:
EliminarYo también tengo pendiente "Blue Collar", su ópera prima. De "Hardcore" te puedo decir que es una sórdida e interesantísima mirada al mundo de la pornografía con un estupendo George C. Scott.
Hace no mucho encontré una buena copia en la red de "light Sleeper", pero lamento no recordar el lugar. Insiste y seguro que das con ella. No te la pierdas.
Un abrazo.
Otras veces me guardo una opinión tan negativa pero esta vez no, aunque sea muy hiriente. No estoy de acuerdo contigo en nada. Por supuesto que recuerda a "Taxi driver", me ha parecido una mala copia. El tipo que hay detrás de la cámara no tiene la menor capacidad de mantener la tensión narrativa y no me creo nada de lo que me cuenta. Hay incluso cosas copiadas exactas a la película de Scorsese. Toda esa ambientación de los suburbios es tan mala que me ha recordado a los suburbios y personajes que te puedes encontrar en la serie de televisión "El principe de Bel-Air". Lo único que soy capaz de salvar de una película, con la que tenía grandes expectativas, es la actuación de Susan Sarandon que es muy creíble y muy llena de matices pero por desgracia aparece muy poco. Willem Dafoe fatal. Tampoco me gusta la música, ossa...
ResponderEliminarUna película que desde Francisco Pardo recomendamos olvidar. Prescindible.:)
Si esta es de las mejores películas de Schroeder no se cuanto sufrimiento me espera cuando vea “Blue Collar”.
Salu2.
Hola, Fransico:
EliminarNo se guarde usted nada, aquí hay libertad de expresión siempre y cuando se guarden las formas. Evidentemente no comparto tu opinión.
Un saludo.