“Esa
es la debilidad del hombre. Una montaña alta le reta a escalarla, un lago
profundo le incita a tirar una roca en él y una chica guapa despierta sus
instintos más primitivos”.
Un
profesor de música (Jin Kyu Kim) decide contratar a una criada (Eun-shim Lee)
para que ayude a su mujer (Jeung-nyeo Ju), embarazada, en las tareas del hogar.
Lo que en principio parece una solución, termina por ser un problema dada la
atracción que la recién llegada siente hacia su jefe.
Estimados
lectores del blog, si están pensando en contratar los servicios de una criada,
por favor, no vean esta película. De lo contrario, les aseguro que desestimarán
tal idea, a no ser que pretendan que sus vidas acaben convirtiéndose en una
auténtica pesadilla. Ni Park Chan-wook, ni Kim Ki-duk, ni Bong Joon-ho, ni Kim
Ji-woon. Kim Ki-young es el director de Hanyo,
la gran obra maestra del cine surcoreano, un enfermizo thriller cercano al terror psicológico que hubiese firmado el
mismísimo Roman Polanski. Nunca un bote de matarratas causó tanta turbación
como el que aparece en este filme, nunca unas escaleras estuvieron tan
íntimamente relacionadas con la muerte como aquí.
Kim
Ki-young estudia las pasiones más bajas del ser humano en esta intensa cinta de
marcado carácter claustrofóbico, donde arremete contra el bienestar material cuando
éste se convierte en la única meta de nuestra existencia. Su moraleja es
evidente. El matrimonio protagonista, formado por un profesor de música y una costurera,
ambos muy trabajadores, ha conseguido alcanzar un nivel de prosperidad que les
permite comprar una nueva vivienda más grande. Tienen dos hijos, una chica
lisiada de unos doce años, y un chico travieso de unos ocho. Además, están a la
espera de un tercero. Sus vidas marchan viento en pompa, hasta que, por recomendación
de una alumna, el profesor contrata a una joven para que se haga cargo de los
quehaceres cotidianos. Pronto ésta se siente atraída por él, quien en una noche
de soledad y arrebato, da rienda suelta a su deseo sexual. Este acto de
infidelidad, acarreará consecuencias terribles e insospechadas para toda la
familia.
Hanyo es una película de espacios reducidos, casi asfixiantes, los que conforman la
casa de dos plantas en la que se desarrolla buena parte de la acción, a los que
la brillante fotografía en blanco y negro de Deok-jin Kim confiere una
atmósfera opresiva deudora del expresionismo. La puesta en escena es
milimétrica y magistral. El cineasta capta con precisión quirúrgica cada plano,
cada detalle. En muchas ocasiones, filma las escenas desde la terraza exterior,
a través del cristal, como si el pudor le impidiera penetrar en la intimidad de
unos personajes abocados a la tragedia.
Es
cierto que el desenlace de la obra alivia, en parte, la tensión acumulada en el
estómago del espectador; pero no por ello éste dejará de sentir la incómoda
inquietud que le ha acompañado a lo largo del metraje.
En
el año 2010, otro director surcoreano, Im Sang-soo, realizó un remake bastante inferior donde se
acentuaba el erotismo latente en el filme original.
Ni la conocía. A pendientes pues! Por cierto, tienes que hacer pronto un top 10 de Ozu. Y otra cosa, te gustó mucho 'Luz silenciosa'? Es por ahora tu favorita de Reygadas? Tengo ganas de ver que se cuenta este buen hombre con 'Post tenebras lux'.. (ninguna de sus películas me ha entusiasmado, no llegan a las 4 estrellas, pero se ve que es un cineasta brillante)
ResponderEliminarUn saludete :)
Hola, neordental:
EliminarPues no deberías perdértela. Es una de esas películas que no olvidas jamás. "Luz silenciosa" me gustó en el plano estético, la gran baza de Reygadas, pero me pareció excesivamente dreyeriana. El "top" de Ozu llegará en cualquier momento. Espero tus votos para la encuesta. Pasaré lista y pondré falta :)
Un saludete.
Me puse con ella en cuanto pude tras leer tu reseña porque puedes estar más o menos acertado en tus comentarios pero está claro que sabes vender una pelicula :).
ResponderEliminarGustarme, me ha gustado, y bastante, pero hay unas cuantas cosas que me impiden llegar a ese punto de admiración que tú has alcanzado. El uso excesivo de banda sonora en ciertos pasajes, la increíble pasividad de los familiares ante la muerte y no sé, yo no veria tan complicado echar a la criada a la calle en cuanto viera que esta un poco pa allá. Veremos si va creciendo con el tiempo o con posteriores visionados pero repito, muy buena.
PD: Cuenta conmigo para la encuesta por difícil que nos lo pongas.
Un saludo.
Se me olvidaba...¿alguna otra surcoreana a reivindicar?
EliminarHola, David:
EliminarJa, ja, ja. Me ha hecho gracia tu comentario. No te falta razón en lo que dices acerca de la falta de credibilidad de algunas situaciones que se dan en la película, pero ¿no crees que es intencionado? Piensa en el final de la cinta, a lo mejor no todo tiene que ser tan veraz...
Por supuesto que cuento contigo para la encuenta. Estoy esperando tu selección :)
Un saludo.