“Espera lo mejor, pero
prepárate para lo peor”.
Dos
niñas de seis y siete años han sido secuestradas. El agente Loki (Jake
Gyllenhaal) es el encargado de llevar a cabo la investigación, lo que no impide
que Keller Dover (Hugh Jackman), el padre de una de ellas, trate de resolver el
caso por su cuenta.
El
director canadiense Denis Villeneuve, al que conocíamos por la estupenda Incendies (ídem, 2010), debuta en
Hollywood con este sombrío y portentoso thriller
dramático que supone uno de los mejores trabajos cinematográficos en lo que va
de año. Prisoners es mucho más que
una simple película de intriga criminal con atmósfera al estilo David Fincher.
Su ambigüedad moral la eleva a la categoría de incómoda reflexión acerca de
temas como la fe, la venganza, la responsabilidad, la justicia, la culpa o el
control de las emociones ante una situación desesperada. Después de verla a uno
se le queda una sensación de mal cuerpo que no remite hasta pasado un tiempo,
tal es el nivel de desasosiego al que somos sometidos durante sus casi dos
horas y media de metraje.
Villeneuve
muestra una gran pericia como narrador, manteniendo la tensión y el suspense a
lo largo de todo el filme. Justo lo que se debe exigir a un buen thriller. El objetivo es que el espectador
desconfíe de lo que ve, sin saber a qué atenerse; y Prisioneros lo consigue con creces y hasta el final. Su atmósfera
encapotada, gris, fría y lluviosa está plasmada de manera magistral por el director de
fotografía Roger Deakins. Hay escenas en verdad escalofriantes, como aquella en
la que el agente Loki registra el oscuro sótano de un sacerdote, o esa otra en
la que entra en el pestilente domicilio de uno de los principales sospechosos
del secuestro. El realizador evita los efectismos inherentes a este tipo de
producciones, optando por una puesta en escena sobria y clásica. El dibujo de
personajes, centrado fundamentalmente en los caracteres de Jackman y
Gyllenhaal, resulta muy adecuado. El primero de ellos es descrito como un tipo
devoto, paranoico, estricto y autoritario. Sería capaz de cualquier cosa por
salvaguardar la seguridad de su familia. El segundo es un policía que vive por
y para su profesión. No se le conoce ningún lazo emocional. Parece algo
desquiciado, lo que se manifiesta en un molesto tic en los ojos. Sus tatuajes y
su carácter impulsivo nos hablan de alguien que tuvo una juventud a buen seguro
problemática. Ahora sólo le obsesiona hacer bien su trabajo y encontrar a las
dos niñas desaparecidas. Ambos actores realizan interpretaciones espectaculares,
de enorme intensidad dramática. Sería difícil e injusto determinar quién de los dos está mejor.
Una
reflexión para concluir. En cierto modo, todos somos prisioneros de algo. De
nuestras emociones, de nuestros miedos, de nuestra conciencia, de nuestro amor por los demás, de la
ley, de Dios, de la sociedad, de la riqueza… Como dijo el poeta y dramaturgo alemán Friedrich
Schiller: “La libertad existe tan sólo en
la tierra de los sueños”. ¿De quién o de qué es usted prisionero?
Buena crítica, coincidimos en todo, pero, solo una objeción: la foto de portada del blog tiene que ser de otra película de Villeneuve, no de la propiamente reseñada. No rompamos las reglas Ricardo, eh jajaja
ResponderEliminarPor cierto, te gustó mas que 'Incendies'? A mí un poquitito menos. Y visualmente es maravillosa, ya es hora de que le den el Oscar al viejo zorro de Deakins, aunque, espero que lo gane el chivo (y creo que sería merecidamente).
Un saludete.
Hola, Raúl:
EliminarNo he encontrado fotos buenas de "Incendies", por eso opté por una de "Prisoners". De todos modos, no es la primera vez que lo hago, ¿eh? :). Y sí, creo que es la mejor película de Villeneuve. Por cierto, "Enemigo" se estrena finalmente en febrero.
Un saludete.
Una reseña perfecta con la que no puedo estar más de acuerdo. Quizás se note demasiado la influencia de "Seven" pero la sobriedad y concisión de su puesta en escena la convierten como bien dices en uno de los títulos mayores en lo que va de año. Saludos.
ResponderEliminarHola, ricard:
EliminarEs cierto que su atmósfera denota cierta influencia de filmes como "Seven" o "Zodiac", pero, a diferencia de esos títulos, "Prisoners" no se queda en el mero thriller efectista, sino que va mucho más allá.
Un saludo.
He visto la peli hoy y me ha fascinado. Para mí sobran algunos subrayados (no hace falta, por ejemplo, que el padre se dé otra vez a la bebida y que, borracho, se eche a la cama y sueñe con su hijita desaparecida), pero el clima y la atmósfera son desasosegantes y perturbadores, Gyllenhaal está que se sale (lo siento, pero no me gusta nada Jackman, o sea, que nada de duelo interpretativo entre estos dos: Jackman tiene que aprender mucho todavía, sobretodo a contenerse), los giros del guión te llevan siempre a un nuevo territorio, etc. etc. etc. De todas formas, el mejor film de Villeneuve aún estaba por llegar: para mí es 'Enemy'.
ResponderEliminarCreo que la mayor virtud del cine de Villeneuve es su capacidad para crear atmósferas enrarecidas. "Enemy" es otro gran ejemplo.
EliminarUn saludo.