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Bella de día (Belle de jour, 1967) de Luis Buñuel.


Séverine (Catherine Deneuve) es una joven esposa que rehúye el contacto carnal con su marido (Jean Sorel), un cirujano prestigioso. La curiosidad le llevará a frecuentar un burdel clandestino de alto standing, donde acabará ejerciendo la prostitución, siendo partícipe y testigo de las más variadas perversiones sexuales.


En manos de cualquier otro cineasta, una novela de tan escasa entidad literaria como la de Joseph Kessel, hubiera dado lugar a un filme melodramático y vulgar; sin embargo, en las de Buñuel, se convierte en una sutil, enigmática y sugerente obra de arte trufada de la imaginería y las obsesiones habituales de su excepcional autor. 

El genio de Calanda vuelve a arremeter contra la moral y costumbres burguesas, en un relato en el que tienen cabida todo tipo de parafilias y desviaciones sexuales (sadismo, masoquismo, vouyerismo, fetichismo, pedofilia, necrofilia, coprofilia…), que sirven como medio de escape y distracción a unos personajes de apariencia intachable y esencia deshonrosa, sin caer nunca en lo explícito.

La película alterna de manera natural y sin previo aviso, realidad, sueños y fantasías; lo que confiere a su conjunto una embriagadora y ambigua atmósfera onírica donde cobran especial relevancia los aspectos simbólicos y surrealistas.


Por la elegante y colorista puesta en escena de Buñuel, van desfilando toda una serie de caracteres pintorescos: el fabricante de caramelos, el ginecólogo al que le gusta vestirse de mayordomo y ser humillado por las prostitutas, el oriental que porta una cajita cuyo contenido, el cual nunca vemos, parece fascinar a las chicas o la pareja de matones que conforman Pierre Clémenti y Francisco Rabal.

 Pero, sin duda, la cinta pertenece a la bellísima Catherine Deneuve, a la que el director aragonés contrató tras quedar cautivado por su interpretación en el filme de Polanski Repulsión (Repulsion, 1965). Su Séverine/Belle de jour (“Bella de día” es el apodo que toma al entrar a trabajar en el prostíbulo, ya que sólo ejerce el oficio durante las horas diurnas), es un personaje frío y tremendamente ambiguo, puesto que nunca sabemos con exactitud, qué es lo que le lleva a ser frígida con su marido y una fulana en el burdel. Tal vez sea fruto de los abusos sexuales que pudo sufrir durante su infancia, como vemos en un breve flashback, o el resultado del choque que se produce entre sus deseos más recónditos y la educación religiosa que ha recibido (contradicción-oposición que encontramos en muchos personajes buñuelianos). También es posible que su doble vida se deba, simplemente, al hecho de que su aburrida existencia burguesa le conduce a buscar emociones fuertes en otro ámbito. Con Buñuel todo puede ser, sobre todo si se trata, como es el caso, de una de sus obras más fascinantes y complejas.


Belle de jour, clásico imprescindible del cine europeo.

11 comentarios:

  1. Se trata de una genial y turbadora película de Luis Buñuel. La interpretación de Catherine Deneuve es increíble por extraña. He de reconocer que la he visto muchas veces y que siempre que la he contemplado me ha parecido una obra rarísima, atractiva y provocadora. El gélido papel de Catherine Deneuve, con esa mirada entre ida e ingenua, siempre me han cautivado. Saludos

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  2. Hola, pesadillas con cuerpo:
    Coincido en lo que dices acerca del personaje de Deneuve, que destaca por su carácter enigmático. Me parece una actriz muy dotada para componer caracteres de psicología compleja. No es extraño que Buñuel apostara por ella después de verla en "Repulsión". En esta película unas veces parece ingenua y cándida; otras, enajenada y perdida. ¿Qué le ocurre realmente? ¿Es cierto que sufre algún tipo de trauma o simplemente se trata de una pervertida reprimida? He aquí uno de los aspectos más atrayentes de "Belle de jour".
    Gracias por tu comentario.
    Un cordial saludo.

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  3. estimado Ricardo,
    infortunadamente casi no tengo peliculas de la etapa francesa de Buñuel, tampoco he visto ninguna interpretacion de la Deneuve, aunque he leido algo sobre ella.Pero por esa sensualidad que deja entrever, y por los elogios a la pelicula, me apunto para verla algun dia.Ya que la calificas como obra maestra, ¿es superior a "el discreto encanto de la burguesia" o "ese oscuro objeto del deseo"? Saludos.

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  4. Hola, José:
    Lamento que tengas dificultades a la hora de acceder a las películas de la llamada etapa francesa de Buñuel. Reconozco que a mí me gusta más la etapa mexicana, pero en Francia también hizo algunas obras imprescindibles como la que ahora nos ocupa o los dos títulos que citas. En cuanto a si considero "Belle de jour" superior a las otras, tengo que decirte que no, ya que las tres me parecen geniales. No obstante, mi favorita es "Ese oscuro objeto del deseo". Tengo pensado revisarlas en breve, así que pronto podremos comentarlas más detenidamente.
    Un saludo y gracias por tu comentario, estimado compañero.

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  5. Aunque inspirada en la novela homónima de Joseph Kessel, al parecer, Buñuel aceptó dirigirla bajo la condición de que se le permitiera absoluta libertad en su adaptación. Ni que decir tiene que sus deseos fueron órdenes cumplidas.
    Esta película propuso satisfacer la curiosidad morbosa de aquellos/as que se quedaron a medias con Repulsion, y no defraudó. Plantea conflictos internos en la protagonista y no los resuelve abiertamente, por lo que gana en profundidad interpretativa de la historia: como bien dices, no están definidos los límites entre la realidad burguesa y los sueños escabrosos de Catherine; no es claro el desenlace, que abandona a los personajes en medio de la naturaleza, a la que sin embargo se asoman desde el balcón de un edificio del centro de París; no se sabe a ciencia cierta si la protagonista desea realmente que le suceda aquello con lo que fantasea, o si todo ello no son más que temores derivados de lo que, precisamente, nunca le sucede… la ambigüedad servida en bandeja de plata y envuelta en un halo de glamour tan sólo posible gracias a la presencia gélida de la reina de las nieves, Catherine Deneuve.

    Saludos cinéfilos.

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  6. Hola, María:
    Es cierto lo que dices, a Buñuel no le gustaba la novela de Kessel; sin embargo, la posibilidad de volver a rodar en Francia tras "Diario de una camarera", y de paso encontrar acomodo definitivo en el seno de la cinematografía del país vecino, hicieron que apenas lo dudara. Él lo que realmente deseaba, era poder proseguir su carrera en España, pero el escándalo de "Viridiana" lo hacía inviable, a pesar de que años más tarde pudo llevar a buen puerto su anhelado proyecto de "Tristana". En Francia, Buñuel contó con más medios que en México, y siempre tuvo bastante libertad creativa, como bien quedará reflejado en este filme y los posteriores.
    Tan morbosa resultó la película en el momento de su estreno, que se convirtió en el mayor éxito comercial de la carrera del genio de Calanda.
    Como bien dices, el desenlace no es claro. El propio Buñuel afirmó que tenía un par de finales en mente, y como no se decidía por ninguno, quiso mostrar en pantalla su propia indecisión a través de la ambigüedad.
    Un saludo y muchas gracias por tu tiempo.

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  7. Deneuve es una mujer que me fascina. Tantas películas he visto de ella. Para sacarle una sonrisa hay que seducirla biennnnn, pero esa sonrisa vale la pena porque te envuelve en un sueño.

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  8. Hola, David:
    Supongo que los misterios que encierra su bella y gélida apariencia, son la principal causa de la fascinación que su presencia sigue provocando. Sin duda, una actriz ya mítica dentro del cine europeo.
    Un saludo.

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  9. fascinante en el sentido más primitivo del término.
    comparto con vosotros mi opinión:
    http://filmfilia.blogspot.com/2010/04/belle-de-jour-luis-bunuel-1966.html

    un saludo!

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  10. Hola, loutinen:
    Sí, Buñuel siempre fue fascinantemente primitivo en el tratamiento psicológico de sus personajes. Un genio, sin duda. Gracias por compartir tu opinión, le echaré un vistazo en cuanto pueda.
    Un saludo.

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  11. Me imagino que debido a su temática y del año en que fue estrenada causó bastante polémica, es definitivamente una propuesta muy muy buena que me recuerda a la serie O negocio cuya temática aborda el tema de las prostitución pero desde una perspectiva muy interesante, se las recomiendo.

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