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La jungla de asfalto (The Asphalt Jungle, 1950) de John Huston.


El Dr. Riedenschneider (Sam Jaffe), que acaba de abandonar la prisión, ha planificado el robo de unas joyas muy valiosas. En su plan colaboran, entre otros, un atracador de poca monta (Sterling Hayden), un prestigioso abogado (Louis Calherm), un inmigrante italiano (Anthony Caruso) y el dueño de un restaurante de mala muerte (James Whitmore). 


Imponente thriller policíaco que supone uno de los más conseguidos e influyentes trabajos de John Huston. Cualquier película posterior cuyo argumento gravite en torno a un robo, desde Atraco perfecto (The Killing, 1956) de Stanley Kubrick hasta Heat (ídem, 1995) de Michael Mann, ha bebido de un modo u otro de este loable y medido ejercicio fílmico.

El propio Huston y Ben Maddow escribieron el guión de la cinta a partir de una excelente novela de W.R. Burnett; consiguiendo un admirable estudio de caracteres que incide en las motivaciones, obsesiones y debilidades de cada uno de ellos.

 Su sobria y expresionista puesta en escena, magistralmente captada por la fotografía en blanco y negro de Harold Rosson, sirve como sombrío escenario de un relato plagado de violencia, corrupción, fatalismo y sueños rotos.


El director vuelve a adentrarse en ese universo de perdedores en el que tan bien se movía, para ofrecernos una visión pesimista y sin concesiones de la putrefacción delictuosa que subyace bajo cualquier gran asentamiento urbano. ¿El resultado? Una incontestable obra maestra.

Reivindicamos, una vez más, la categoría actoral de Sterling Hayden, que realiza aquí una soberbia interpretación de un rudo y orgulloso delincuente; uno de esos tipos nobles a los que la mala suerte en la vida ha conducido hasta el irredimible mundo del crimen. Su composición aparece espléndidamente secundada por el resto del reparto, que incluye uno de los primeros papeles de la eternamente sensual Marilyn Monroe.


The Asphalt Jungle es un clásico imprescindible que no debe faltar en ninguna filmoteca, una pieza clave en la historia del género negro. Huston nunca hizo nada mejor.

6 comentarios:

  1. Imprescindible joyita del cine negro, un Sterling Hayden en estado de gracia y una novata Marylin bellisima,(espectacular fotograma el que publicas) son el mejor ingrediente para revisionar este clasico, junto con Scarface la antigua de las que mas me gustan, este fin de semana me anoto para paladearla de nuevo. Por cierto, siempre me ha parecido que el titulo de esta pelicula se haya trasladado antojadizamente a la saga "La jungla de cristal" que en Latinoamerica se llama "Duro de matar" que es muchos mas exacta al titulo original "Die Hard". En la peninsula, si que teneis dobladores muy imaginativos, jeje. Saludos.

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  2. Hola, José:
    Sí, en la Península tenemos tantos dobladores de títulos imaginativos como cutres. No había pensado en la relación que estableces entre "La jungla de asfalto" y "La jungla de cristal", pero parece que, efectivamente, debieron inspirarse en la obra de Huston. Aquí llamaron "Duro de matar" a un bodriazo de los noventa que protagonizaba Jackie Chan :). Me encanta el "Scarface" de Hawks, infinitamente superior al desaforado remake perpetrado por De Palma. En cuanto a Marilyn, ¿qué se puede decir que no se haya dicho ya? Esta mujer seguirá siendo sensual dentro de trescientos años...
    Agradezco tu comentario, estimado compañero que reside allá en la lejana Bolivia :).
    Un saludo.

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  3. Hola camarada, ya de vuelta y veo que has revisado esta excelentísima película de mi amado John Huston.
    Repetiré unas lineas que escribí en su momento al acercarme a la película en Ciclos de Cine:
    La composición de cada uno de los personajes es tan veraz que nos presenta a unos individuos que aun siendo ladrones, corruptos o traidores están dotados de motivaciones y debilidades tan reales y humanas que es imposible no empatizar con ellas.
    Y si además estos personajes se ven arrojados a un mundo carente de reglas en el que impera la fatalidad (que sin remedio les conducirá a un final terrible, pese a enfrentarse una y otra vez a ésta). La empatía del espectador hacia ellos se convierte en verdadera simpatía y conmiseración.

    Un abrazo camarada cinéfilo y magnífica reivindicación.

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  4. Hola, David:
    Yo también creo que la hondura psicológica que poseen los personajes, es la clave esencial de esta enorme película. Lo que los hace reales y cercanos al público, independientemente de que sus actos sean más o menos censurables. Precisamente esto es lo que han tratado de imitar multitud de películas posteriores. Tampoco olvidemos el lirismo que emana de algunas secuencias; como ese desgarrador final en el que el gran Sterling Hayden, trata de alcanzar su sueño debatiéndose entre la vida y la muerte. Lo dicho, obra maestra absoluta y el mejor filme de Huston.
    Ya me he enterado de que no se te ha pegado nada del existencialismo angustioso de Bergman allá por Suecia, ¿no? :)
    Un abrazo, camarada. Gracias por ofrecernos tu visión de la película.

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  5. Una vez más gran reseña Ricardo, sabes que soy fan del cine negro y como dices esta película es un clásico imprescindible. Me están entrado ganas de volver a revisarla, un abrazo fuerte amigo

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  6. Hola, Pedro:
    Entiendo tus ganas de querer volver a revisar este clasicazo. Me parece una obra que gana con cada nuevo visionado, así que te animo a que la vuelvas a disfrutar.
    Un abrazo fuerte también para ti, amigo mío.
    Gracias por tu comentario.

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