Páginas

Valor de ley (True Grit, 2010) de Joel y Ethan Coen.

“Huye el impío sin que nadie lo persiga…”
(Proverbios 28:1)

Mattie Ross (Hailee Steinfeld) es una niña de catorce años que busca venganza por el asesinato de su padre a manos de un canalla llamado Tom Chaney (Josh Brolin). Para capturarlo, decide contratar los servicios del envejecido alguacil Rooster Cogburn (Jeff Bridges), conocido por su valentía y sus excesos con el alcohol. En su viaje les acompañará LaBoeuf (Matt Damon), un ranger de Texas que busca a Chaney por el asesinato de un senador.


Nueva adaptación, que no remake, de la novela homónima de Charles Portis que ya había sido llevada a la gran pantalla en 1969 por Henry Hathaway con John Wayne como protagonista principal. Esta versión anterior, aunque resultaba interesante y sumamente entretenida, distaba mucho de cualquier tipo de grandeza más allá de la conseguida interpretación de The Duke. Y es que el talento de Hathaway, pese a tratarse de un correctísimo especialista en el género (El jardín del diablo, Los cuatro hijos de Katie Elder, Nevada Smith…), quedaba muy lejos del de grandes maestros como Ford, Hawks, Walsh o Mann.

En manos de los Coen, cineastas irregulares pero de indiscutible interés, el relato de Portis gana en profundidad y madurez, resultando más crudo y grave en el fondo, y más áspero y sobrio en la forma.

Si la subversión de los géneros ha sido la constante habitual en la carrera de estos hermanos de Minnesota, aquí nos sorprenden presentando un western de marcado corte clásico, aunque aderezado con unas dosis de hiperrealismo pocas veces vista en el género.


La voz en off de la protagonista, que ya adulta recuerda su pasado, nos introduce, a modo de prólogo, en una historia que será narrada con tacto sereno hasta desembocar en su fordiano epílogo, el más hermoso y poético jamás filmado por los autores de Fargo

Esta fábula sobre el bien y el mal, está envuelta en una extraordinaria, y por momentos evocadora (bellísima la secuencia nocturna bajo un cielo estrellado en la que Cogburn cabalga para llevar a Mattie a un médico), fotografía de Roger Deakins, un colaborador ya habitual en sus trabajos.

El dibujo de los tres personajes principales está perfectamente trazado, así como la evolución de la relación entre los mismos, que pasa de ser de cierta confrontación y desconfianza al principio, hasta convertirse progresivamente en leal y afectiva.


Hailee Steinfeld se muestra como una auténtica revelación, soportando el peso dramático de la trama con una composición repleta de matices. El Cogburn de Bridges, por su parte, no desmerece en absoluto la interpretación de Wayne. Menos brillante, aunque también convincente, resulta la labor de su compañero de viaje, un Matt Damon que mejora día a día. Es una lástima que frente a ellos no encontremos a unos villanos de mayor entidad, ya que su retrato no supera la mera caricatura.

True Grit es, en cualquier caso, una excelente película. Una gran muestra de ese extraordinario género, por desgracia casi extinguido, que es el western.


8 comentarios:

  1. Excelente, no se me ocurre otro calificativo mejor. Yo también opino que es mejor que la versión de Hattaway, aunque tengo que confesar que soy seguidor del cine de los hermanos y que Jeff Bridges me parece un gran actor.
    La película se me pasó en un suspiro, me hizo reir, emocionarme y deleitarme. La narración, la ambientación, los paisajes, las interpretaciones (todos fantásticos) y esos toques Coen que a pesar del clasicismo de la cinta no faltan.

    Un saludo y espero sinceramente que "True Grit" le patee el culo a "la red social" en los oscars.

    ResponderEliminar
  2. Hola
    Tengo que decir, a favor de los hermanos Coen, que han conseguido que un western(género del que no soy nada seguidora), me engache hasta el final y me conmueva, la verdad es que, me han sorprendido.
    El prólogo...me encantó
    Y tú... como siempre, estás de diez.
    Un besito

    ResponderEliminar
  3. Hola, David
    A mí me parece bastante superior a la versión de Hathaway, no tengo ninguna duda al respecto.
    Me temo que en los Oscar el pescado ya está vendido en favor de "El discurso del rey" y "La red social", que se repartirán los premios gordos. A "True Grit" le caerán fotografía y espero que actriz de reparto por el impresionante trabajo de Hailee Steinfeld. Aunque no entiendo qué hace en esa categoría cuando es claramente una interpretación principal. En cualquier caso, el mayor de los premios es que te reconozca el paso del tiempo, y ahí "True Grit" sí que saldrá airosa.
    Un saludo, camarada cinéfilo.

    ResponderEliminar
  4. Hola, María
    Es cierto que el western no es un género que apasione en demasía a las mujeres. Demasiada virilidad y testosterona ¿Verdad? En esta cinta los Coen han sacado a relucir su lado más lírico y emotivo, realizando una de sus obras, estética y conceptualmente, más maduras.
    El prólogo al que aludes es un prodigio de belleza y saber hacer cinematográfico.
    Por cierto, que el diez es para ti por tu simpatía.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  5. Estoy deseando verla... un western de los Coen es una combinación explosiva. Sobre Cisne Negro decirte que me gusto es diferente al repetitivo cine actual. Está claro que Darren Aronofsky es uno de los directos más originales y personales de la actualidad, pero me dejo mal cuerpo....

    ResponderEliminar
  6. Hola, Pedro
    Los Coen han madurado, no esperes su lado más gamberrete, sino el sabio y sereno del que sabe lo que hace. Algo que ya pusieron de manifiesto con su excepcional "No es país para viejos", película que, por cierto, no fue precisamente la que más gustó entre sus seguidores.
    Sobre "Cisne negro" decir que, en mi opinión, es el mejor filme de 2010. A mí me fascinó su carácter turbador y enfermizo. Aronofsky es el director más interesante de su generación, así que espero que siga haciendo películas tan atractivas como la citada.
    Un saludo y gracias por pasarte por aquí.

    ResponderEliminar
  7. Sobre "Cisne negro" estamos de acuerdo, una de las películas más sugestivas y desgarradoras que he tenido la oportunidad de ver, y a la vez un canto a la belleza de la posibilidad de una perfección que existe en el hombre más allá de un alto precio.

    Los Oscars, como bien predijiste sabio Ricardo, se repartieron entre "El discurso..." y "La red..."

    Un placer pasar por aquí.

    ResponderEliminar
  8. Hola, álex:
    Tal y como iba la temporada de premios en EEUU antes de los Oscar, era fácil prever que la lucha final estaría entre las cintas de Hooper y Fincher. Dos películas que caerán fácilmente en el olvido, algo que no sucederá con "Black Swan", cuya oscura belleza era demasiado transgresora para la anquilosada academia.
    El placer es mío por tenerte por aquí. Muchas gracias por molestarte en escribir.
    Un cordial saludo.

    ResponderEliminar