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El baile de los vampiros (Dance of the Vampires, 1967) de Roman Polanski.


El profesor Abronsius (Jack MacGowran) y su joven discípulo Alfred (Roman Polanski), viajan hasta una remota aldea de Transilvania con el objetivo de confirmar sus teorías sobre el vampirismo. 


Brillante, divertido e inteligente filme que parodia los títulos de vampiros que por entonces tenían un gran éxito en Europa de la mano de la productora Hammer. El genio malicioso e irrepetible de Polanski, logró con Dance of the Vampires, equilibrar a la perfección el tono humorístico del relato con una extraordinaria y lúgubre plasmación gótica del mismo.

Bajo su apariencia de comedia negra, la película esconde uno de los más rigurosos tratados relativos al vampirismo legados por el cine; de modo que tras su visionado, el espectador sabrá todo lo que tiene que saber acerca de estos monstruosos a la par que fascinantes seres: su necesidad de alimentarse de sangre para prolongar sus longevas existencias; el hecho de que sólo pueden deambular por la noche, lo que les obliga a descansar en ataúdes durante el día; su invisibilidad ante los espejos o cualquier otro objeto que desempeñe una función similar; el rechazo que les producen los ajos y los símbolos religiosos; su temor hacia una estaca de madera bien afilada…


El autor de La semilla del diablo, vuelve a dejar constancia de su maestría a la hora de captar atmósferas amenazantes, sublimando y embelesando la puesta en escena mediante el adecuado aprovechamiento de los excelentes decorados (el del castillo es de lo mejor que se ha visto en el género) y un sobresaliente trabajo de cámara. Con todo ello, la cinta consigue alumbrar algunos momentos imborrables: el descendente y levitante ataque del conde von Krolock (Ferdy Mayne) a Sarah (qué belleza tan perfecta la de la malograda Sharon Tate) mientras la joven disfruta de un baño caliente de espuma, el irónico final y, sobre todo, la alucinante secuencia del baile, en la que un grupo de aristocráticos y pútridos vampiros, ataviados con los restos de lo que otrora debieron ser elegantes galas, ven cómo su decadente y mortuoria danza, acaba siendo interrumpida por dos invitados que no esperaban.


En definitiva, espléndido filme que se disfruta visionado tras visionado, y que desde su estreno no ha perdido ni un solo ápice de su capacidad para hacernos reír. Eso sí, tengan mucho cuidado, no vaya a ser que entre carcajada y carcajada, surja de detrás de sus confortables sofás algún chupasangre dispuesto a dejarles marcado el cuello. 


18 comentarios:

  1. Es una película que gana con el paso del tiempo, sin duda muy brillante. Ello no obstante, nunca me ha hecho reir, sólo sonreir. ¿Es ésto un problema?

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    1. Hola, ricard:
      Yo, personalmente, no me canso de verla. Polanski en estado puro. Me río bastante cada vez que la reviso, pero no creo que sea una comedia desternillante. Además, siempre la puedes disfrutar a un nivel puramente cinematográfico, que es, al fin y al cabo, aquello que la convierte en una gran película.
      Un saludo.

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  2. Cierto: carcajadas y carcajadas.
    Una película divertida que merece la pena ver de vez en cuándo.
    Saludos.

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    1. Hola, Manderly:
      Efectivamente, se trata de una película muy divertida :). Cada uno o dos años me apetece volver a revisarla. Difícilmente me cansaré de ella.
      Saludos y gracias.

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  3. gran película, pero fue masacrada por los productores en la sala de montaje, incluso cambiaron el final. Nunca sabremos cómo era el film que realmente Polanski tenía en mente.

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    1. Hola, Luis Cifer:
      Es posible que esté equivocado, pero, hasta donde yo sé, la versión que todos conocemos, la que está editada en DVD, es la íntegra. Sí que es cierto que en el momento de su estreno, para su distribución fuera del Reino Unido, se le amputaron unos quince minutos de metraje y hasta se le cambió el título para enfatizar que se trataba de una comedia. De todos modos, puede que esté equivocado.
      Un saludo y gracias por participar.

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    1. Hola, Woland:
      Permíteme que no entre en tu valoración sobre la película. No me apetece.

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    2. La ambientación y la atmósfera son muy buenas, pero como comedia me resulta bastante estúpida. Y precisamente ese tono es le resta cualquier tipo de tensión a la parte "seria". Polanski es un gran director, pero aquí aprecio sus limitaciones a la hora de abarcar el minusvalorado género de la comedia. En todo caso una película que hay que ver. W

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  5. ¡Aaaay camarada! Yo también le hubiera hincado el diente de buena gana a esta versión pelirroja de la Tate ;)
    Muy divertida.

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    1. Hola, camarada:
      Me hubiera convertido gustosamente al vampirismo (¿quién no?) con tal de morderle el cuello a la Tate, cuya "versión pelirroja" me parece simplemente despampanante.
      Un abrazo ;).

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  6. Verás, Ricardo, cómo te lo diría... ah, sí: me has hundido en la miseria. Porque tenía preparada la entrada de esta película para el próximo miércoles con un texto revisado y ligeramente ampliado sobre el demasiado sucinto que publiqué en su día en la guía "Movie Movie", además de una bonita selección de imágenes del film. Bueno, ahora estoy flotando en un mar de dudas porque tú y yo parece que admiramos esta obra de Polanski por razones muy parecidas. Tratándose de "EL BAILE DE LOS VAMPIROS", me temo que era casi inevitable.
    En fin, a riesgo de resultar redundante, supongo que no sabré resistirme al propósito de darle salida como tenía previsto.
    Mientras, un abrazo.

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    1. Hola, Teo:
      Vaya, lo siento, parece ser que ha sido una maldita casualidad. O quizá no tanta, porque yo la revisé hace unos días a raíz de que hablásemos brevemente sobre ella en la entrada dedicada a "La máscara del demonio". En cualquier caso, ni siquiera dudes en publicarla, que yo estaré encantado de leerla :).
      Un abrazo.

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  7. Hola, Ricardo: Por fín pude ver "El baile de los vampiros". A principio, con ese paisaje nevado en tono gris azulado, parece que estás contemplando un cuadro. Terrorífica la aparición del conde por el ventanuco del techo, de la habitación donde se baña Sara ( a pesar de la ingente cantidad de ajos que hay en la posada); pero también me he divertido mucho viéndola; tiene muchas escenas que podrian destacarse en este sentido; a mi me ha gustado especialmente aquella en la que Alfred está en el dormitorio del hijo del conde, mientras éste le lee el librito amoroso, que le salva de la "mordida" y la posterior persecución; la secuencia del baile y el final. Enfín que me ha gustado mucho, a pesar de estar todo el tiempo con la mano puesta en el cuello y mirándome en el espejo de vez en cuando, por si acaso...ja, ja.
    Un abrazo

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    1. Hola, selegna:
      Es cierto que la secuencia en la que Alfred está a punto de ser "seducido" por el hijo amanerado de von Krolock, resulta divertidísma a la par que tensa con esa infatigable persecución por el castillo. Veo que no te tragas que con tanto ajo von Krolock entrara en la posada, ¿no? :). Lo de que te taparas el cuello me parece genial, pero recuerda que, tal y como sale en la película, los vampiros también muerden en brazos, pantorrillas y donde sea necesario :P. Ahora en serio, me alegra mucho que hayas disfrutado de este excelente filme.
      Un abrazo, simpática.

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  8. Bueno, es que fue inteligente, por eso entro por arriba derechito a la bañera. La verdad es que los "agujeritos" de cuello, brazos, etc ( como dejaron al posadero, XD) eran terroríficos. Por cierto, no se si habrá sido un despiste, pero se supone que Sara no tendría que verse en el espejo del salón de baile ¿No? ¿o eso es una cualidad sólo de la aristocracia vampírica?

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  9. Al posadero lo dejaron como un coladero :P. Con respecto a lo que dices de Sara, creo que si aparece en el espejo es porque aún no se ha convertido completamente al vampirismo, algo que sucede ya casi al final. No obstante, también podría ser un "trampa" de Polanski para que no sospechemos nada. Quédese usted con la versión que más le guste ;).
    Un abrazo.

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  10. ja, ja, ja... ¡con pareado y todo! Me quedo con la versión de la "trampa". Gracias. Buenas noches y cierra bien las ventanas.
    Hasta pronto. Un abrazo

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