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Las amargas lágrimas de Petra von Kant (Die Bitteren tränen der Petra von Kant, 1972) de Rainer Werner Fassbinder.


Petra von Kant (Margit Carstensen) es una afamada diseñadora de moda que vive junto con su sirvienta muda, Marlene (Irm Hermann). A través de una antigua amiga conoce a Karin (Hanna Schygulla), una joven aspirante a modelo de la que se enamora perdidamente. 


Extremo y brillante melodrama lésbico de gran calado psicológico con el que Fassbinder, uno de los más destacados representantes del llamado Nuevo cine alemán, adaptaba a la gran pantalla su propia obra teatral. El filme constituye un perfecto ejemplo de lo que es un Kammerspielfilm: pieza cinematográfica de cámara que respeta, aunque no en el sentido más estricto, las tres unidades clásicas de tiempo, lugar y acción.

Haciendo uso de un único decorado, una de las estancias del apartamento de la protagonista, el cineasta germano nos ofrece una cruda, claustrofóbica, pesimista y estilizada reflexión sobre la dominación, el deseo, los celos y el dolor en las relaciones humanas. La película se estructura en cuatro actos, cerrados con fundidos en negro, y un epílogo. En función del contenido de los mismos, me he tomado la libertad de otorgarles un título:

- Acto primero: la inseguridad cubierta con los ropajes de la liberación.
- Acto segundo: el sutil juego de la seducción.
- Acto tercero: hastío y asco derivados de la convivencia.
- Acto cuarto: desesperación.
- Epílogo: toma de conciencia de la realidad.


De los seis personajes, todos ellos femeninos, que aparecen a lo largo del metraje, sólo dos están siempre presentes: Petra von Kant y su silente esclava. Esta última, que se mantiene fiel a su señora porque la ama, se hace advertir (intencionadamente) incluso estando fuera de campo, como cuando escuchamos su violento y celoso mecanografiado al percatarse de que su ama está seduciendo a la joven modelo. 

La influencia pictórica de Klimt se hace evidente en una puesta en escena en la que destacan la bella composición de planos y una precisa planificación de las tomas más largas (muy frecuentes). A través de múltiples angulaciones y delicados movimientos de cámara, el director trata de agilizar una narración inevitablemente teatral. El decorado evoluciona con el transcurrir de los actos, despojándose progresivamente de elementos ornamentales y tornándose más sobrio como reflejo del vacío existencial al que se encamina la protagonista.


Por su radicalidad expresiva, Die Bitteren tränen der Petra von Kant no es un trabajo que se deguste con facilidad. No obstante, si aceptamos el fascinante juego que nos propone Fassbinder, nos encontraremos ante un exquisito bocado del mejor y más personal cine.

8 comentarios:

  1. De Fassbinder, solo tengo su extenso experimento Berlin Alexenderplatz que hasta hora no termino de ver, porque la verdad se me hizo muy pesada y a momentos aburrida. aunque no se puede negar que su cine es muy personal. Por cierto, lindo encabezado, como me mola esa actriz francesa, jeje. Saludos.

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  2. Un intenso estudio sobre las relaciones de poder en el amor tapizado con mano generosa de una atractiva estética realmente lograda. Hasta ahora, de lo mejor que he visto del alemán.
    Un saludo, compañero, me alegra ver que compartimos afinidades "Fassbinderianas".

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  3. Fassbinder me encanta y esta película no es la excepción, aunque creo que su mejor obra es "En un año con trece lunas". De esta, me impacta mucho la puesta en escena que es genial (¿cómo puede ser que no salgan de una habitación y aún así resulte tan rica?) y la gran cantidad de elementos autobiográficos que se encuentran magníficamente plasmados. Un saludo.

    (Ricardo: ¿supongo que, como parece que no te gusta tanto el manierismo sirkiano que adoptó en los años 70 y 80, eres de los que prefiere al primer Fassbinder, verdad?).

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  4. Hola, José:
    Pues fíjate que yo tengo pendiente la serie "Alexanderplatz", así que espero saldar esa deuda en algún momento de mi vida. Veo que lo tuyo con Carole Bouquet ha sido un auténtico flechazo :).
    Saludos, estimado colega.

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  5. Hola, Irimiás:
    Creo que, en líneas generales, somos bastante afines cinéfilamente hablando. Luego, claro está, cada uno tiene sus filias y fobias particulares. Para mí, "Las amargas lágrimas de Petra von Kant" también es de lo mejorcito que hizo Fassbinder.
    Un saludo.

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  6. Hola, Woland:
    Fassbinder me interesa muy especialmente a partir de esta película. Es complicado decir cuál es su mejor trabajo. A nivel emotivo, me quedo con "Todos nos llamamos Alí", pero luego están la obra que ahora nos ocupa, "La ley del más fuerte", "El matrimonio de Maria Braun", "Un año con trece lunas", "La ansiedad de Veronika Boss"... Un gran y muy personal cineasta, sin duda.
    Un saludo.

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  7. "Berlín Alexanderplatz" es seguramente la adaptación literaria definitiva, junto "Amor de perdición" de Oliveira (de quien nunca se habla por aquí). Y aunque se podría decir que es una serie, se rodó y se concibió como cine (al igual que Fanny y Alexander). Inclusive el mismo Fassbinder dijo que era una película en 13 capítulos o algo así...

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  8. El sadomasoquismo psíquico y la relación de dominación en la pareja los explora Fassbinder también en 'La ley del más fuerte' (son dos hombres aquí; el dominado masoquista es interpretado por el propio Fassbinder), pero con mucha menos sutileza y penetración (es una película que me gusta pero al mismo tiempo la encuentro risible: me cuesta comprender que alguien pueda ser tan inocentón y tan debilucho como el personaje interpretado por Fassbinder; me hace gracia que alguien con tan mala leche como él se ponga en la piel de un dominado bonachón-tontaina).

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